Introducción
En mi trayectoria profesional en la Industria Farmacéutica, desde el año 1.961, principalmente realizando labores de marketing y de formación, uno de los temas que siempre me ha preocupado ha sido el tratamiento de la Litiasis y/o Colelitiasis y por lo tanto, de la eliminación de cálculos (cálculos renales, cálculos, piedras en el riñón o formación cálculos) y cuerpos cristalinos en el organismo.
Me ha preocupado primeramente por la gran frecuencia con que se presenta, que constituye un auténtico problema socioeconómico.
En segundo lugar, por la complejidad de su etiopatogenia.
En tercer lugar, por los problemas que ocasiona.
Y en cuarto lugar, por el limitado arsenal terapéutico disponible para su tratamiento por vía química, aunque se están haciendo avances considerables con las nuevas técnicas de litotricia extracorpórea que utilizan ultrasonido para estallar los cálculos por implosión.
Aparte, considero que el transplante renal, maravilla de la técnica quirúrgica, es sólo la manifestación externa y visible de las limitaciones de la medicina para prevenir la integridad de ese importantísimo órgano. Los progresos médicos y terapéuticos, aunque grandiosos, no son suficientes.
También quiero incidir en la importancia que tiene la hidratación, limpieza y acondicionamiento de la piel. Tanto a nivel de regular y limpiar el organismo, como desde el punto de vista cosmético.
La piel es el órgano más grande del cuerpo humano, lo protege contra la desecación y regula su temperatura. Pero también es un almacén de sustancias nutritivas y retiene residuos de procesos metabólicos. Si el organismo funciona mal, la piel estará sucia y pierde frescura. También es una coraza frente a agentes externos: la contaminación, los rayos ultravioleta del sol, los cambios de temperatura, el estrés, la falta de sueño, la mala alimentación y en consecuencia las digestiones defectuosas. Todos estos factores y muchos más, contribuyen a acelerar la pérdida de la salud de la piel.
La necesidad de mantener constantemente la piel limpia y perfectamente hidratada es muy importante para la salud. Pero no sólo es importante para la salud, es también imprescindible y vital para que los tratamientos y sistemas que se aplican en cosmiatría sean eficaces.
Por todo ello, hay que enfatizar en la responsabilidad del individuo, ampliarle los conocimientos para atender aspectos personales de su salud. En una palabra, hay que prevenir.
Estamos en el empeño de dar a conocer (con labor de misioneros) nuestro Sistema SLACKSTONE II® para preparar Agua Dialítica, sabiendo de nuestras limitaciones materiales, pero con nuestros grandes deseos de persuadir a los profesionales responsables de la salud de la población a que lo incorporen en sus tratamientos.
Nuestro punto de partida es el agua, denominada como "el disolvente universal" y utilizamos un proceso físico lógico y contrastado, no invasivo, sencillo, no costoso ni molesto y de fácil utilización, con la gran ventaja de no producir efectos secundarios ni interacciones.
Llevamos muchos años (desde 1.966) ayudando a las personas con nuestro Sistema y nunca hemos estado en contra de las nuevas tendencias, ya que por ejemplo, en el caso de la litotricia es un coadyuvante ideal para eliminar los fragmentos de cálculos producidos después del proceso.
Por último, nuestro profundo agradecimiento a todo aquél que se interese por el SistemaSLACKSTONE II® para prepararAgua Dialítica. Entre todos colaboraremos a mejorar la salud y por lo tanto el bienestar de las personas.
Daniel J. Yborra Quesada
Titular del Sistema SLACKSTONE II®